Cuando no alcanza el amor que ofrecés y peleás una causa perdida
el amor se transforma en herida que no cierra,
y que no deja ver
Y ceder en la apuesta es tan duro,
sin apuro y sin pausa empezás a perder...
los piojos.-
Tengo por bien sufrido lo sufrido, tengo por bien llorado lo llorado, porque después de todo he comprobado, que no se goza bien de lo gozado, sino después de haberlo padecido. porque después de todo he comprendido, que lo que el árbol tiene de florido, vive de lo que tiene sepultado. Bernárdez-